lunes, 22 de junio de 2009

Sexto Sentido. Fragmento.

INT. GYMNASIUM - AFTERNOON

It's a large shadowy GYM. Climbing ropes hang from the wood beamed ceiling. Cole is trembling slightly as he stands next to Malcolm.

MALCOLM

What is it?

Malcolm follows the child's gaze to the ceiling of the gym.

MALCOLM

I don't see.

COLE

Be real still.

Malcolm looks to Cole and then turns back to the ceiling.Malcolm's body becomes very still. Beat.

COLE

Sometimes you feel it inside.

Like you're falling down real fast,

but you're really just standing

still.

Malcolm looks at the wood beams and climbing ropes.

COLE

You ever feel prickly things on the

back of your neck?

MALCOLM

Yes?

COLE

And the tiny hairs on your arm.

Are they all standing up?

Malcolm glances at Cole. Surprise on his face.

MALCOLM

-- Yes.

COLE

(whispers)

When they get mad, it gets cold.

MALCOLM

Them?

Malcolm looks at the empty stairwell and then back to Cole. Nothing is said for a few moments.

MALCOLM

I don't see anything.

Are you sure they're there?

Cole?

Malcolm turns back to Cole, he finds the child with tears in his eyes. Cole looks at Malcolm desperately.

COLE

Please make them leave.

Malcolm stares helplessly.

MALCOLM

(whispers)

I'm working on it.

Malcolm gently leads Cole away from the stairs. COLE GLANCES BACK AS HE MOVES OUT OF THE STAIRWELL. COLE'S P.O.V. -- The ropes and school banners dangling at the top of the stairs sways a little... But so do THE THREE BODIES HANGING BY THEIR NECKS FROM A WOODEN BEAM.

It's a truly horrific sight. A BLACK MAN in britches and no shirt, face beaten to a pulp, hangs in the center. A WHITE WOMAN in a torn white frilly dress -- tears soaking her face, hangs to the right. A small MIXED RACE CHILD in half pants, hangs to their left. The family stares at Cole. They follow Cole with their tortured eyes as he exits the stairwell.

Escena de Sexto Sentido de M. Night Shyamalan.

viernes, 19 de junio de 2009

aprendizaje mínimo


El debate era sonoro, se sucedían intervenciones que ganaban en intensidad, amagué un par de veces aportar lo mío, pero sin la convicción suficiente como para ganar mi turno. "Mire don si no sabe de que va a hablar mejor mándese mudar de acá que ya somos demasiados alzando la voz con énfasis y actitud" Una mirada puede decir todo eso y más creo yo. Mi impulso me llevaba a la intervención acalorada, pero repentinamente y en un gesto de cautela interno e imperceptible tuve que aceptar que realmente no sabía que quería decir. Para tantos es tan fácil iniciar una perorata sobre cualquier cosa, tanto desfachatado se sube a un escenario y la va de comediante que yo en mi egocentrismo me sentí con derecho a algo parecido. La cuestión es que me di media vuelta y me fui.
Pienso ahora que esa vez tomé otra opción. Una que no he solido elegir y lo bien que me hubiera venido tantas veces! Opté por callar, por suspender todo impulso exteriorizante. Pude, con un esfuerzo que finalmente no fue tan grande, sujetar ese ánimo desbocado que suele llevarme a la manifestación, las ansias se tornaron manejables y finalmente el placer del silencio se consolidó en mi.
Había sin embargo un gesto ampuloso, sobreactuado en el irme, como una molestia que todavía se vinculaba a las ganas contenidas de intervención. Pude darme cuenta y detuve esa marcha enérgica, doblegué la sensación de despecho y volví sobre mis pasos, a escuchar, simplemente, a atender los argumentos del resto, con toda la energía puesta en la atención y la reflexión interna.
Al cabo de un rato me fui, que una cosa es saber callar y otra prestarle la oreja a cualquier salame.

martes, 16 de junio de 2009

Mapeo de mi

De repente se me aparece una especie de mapa de mi.
Se me aparece como si fuera una página web a medio hacer pero igual funcionando.
Una "Página en Construcción". O más bien una categoría de "Página a medio hacer".
La home tiene un montón de links, no podría decir ahora cuantos son ni cuáles exactamente.
Está la foto de Pili.
Está la foto de mis viejos.
Está la foto de mi hermano.
Está la foto de Karina.
Está la foto de mis amigos.
En un lugar dice Cine. También otro que dice Mujeres.
En otro Conocimiento. También hay uno de Fracasos, otro de Proyectos. Los dos son bastante voluminosos.
Cada uno tiene música, toda muy variada.
Con un click sobre la imagen o palabra vamos a su sitio.
Pero cuando entramos a cada uno de esos links, hay textos, borroneados y discontinuos.
Son grupos de relatos incompletos. Hay fotos de gente, hay pequeños videos o secuencias de imágenes. Muchas. Montones.
No tengo fotos mías y sí de los lugares y los momentos que viví.
La plantilla standard fue modificada obviamente en algunos casos porque era necesario incorporar nuevas categorías y en otras porque las ventanas prestablecidos no se podían completar
Diría que sobre todo hay un problema de hilación. Se trata de un sitio que no se entiende muy bien de que trata y cómo hay que hacer para recorrerlo.
Pues bien no pierdo las esperanzas de mejorarlo y volverlo un poco más coherente y claro.

jueves, 11 de junio de 2009

Ups! Un agudo desacuerdo con mi amigo

Mi querido y tierno amigo Orson - amigo, amigo, de años, de un tiempo fuera de los calendarios- dice comentando una entrada previa"Jamás la angustia como condición para la creación".
Orson La verdad es que tengo que decir que disiento profundamente en parte con tu afirmación.
No es que piense en una condición como en un protocolo, como una especie de burocratización de del proceso creativo "Siga los siguientes pasos: levántese tarde, coma poco y beba mucho, fume a cualquier hora, maltrate a su pareja y luego llore arrodillado ante ella por sus exabruptos. Luego siéntese a escribir"
Si algo tendrá, creo, el proceso creativo es cierta esencia inconmensurable, indefinible. Aún así creo que todo acto creativo parte de una situación de angustia, de falta, de vacío. Creo que uno se expresa porque algo le falta, justamente aquello que se propone decir. Uno escribe, filma, pinta, diseña, equis, porque en algún lugar, más o menos conciente uno siente que algo, justamente eso que uno está haciendo, le falta al mundo.
No me imagino, ni encuentro en la historia, las mejores obras surgidas de mentes felices y estables, más bien percibo que han surgido de seres sufrientes, dolidos, de intimidades turbulentas y en pugna irredenta con el mundo.
Claro, prefabricar estos estados,"producirlos" es como una versión Academia Pitman de la labor creativa. Definitivamente no suscribo eso. Sí creo en la relación entre creación y dolor. Y la obra como un paliativo, a veces escaso o inutil - para mí los mejores casos-, a veces como un analgésico o un narcótico estimulante de las peores zonas del narcisismo.
Marx dijo que la lucha de clases es el motor de la historia, yo creo que la angustia es el motor de la creación artística.
Orson te quiero.


lunes, 8 de junio de 2009

Buscando inspiración

Carezco de estrategias para inspirarme.
Durante un tiempo creía en ciertas sustancias, las quería también, mucho. Tanto que en realidad eran lo único que me importaban. Digamos que se habían convertido en un fin en si mismas, olvidando que debían ayudarme en la tarea creativa.
Bien, he aprendido a ponerlas en su lugar, diría más, ya no tienen ningún lugar. Las sustancias digo, esas que tanto me gustaban.
Pero carezco de momento, de estrategias eficaces para lograr inspiración.
La música es como una cuestión básica, el vino tinto también, pero después de cierta hora.
Estoy buscando inspiración y tengo miedo que sea la angustia la mejor solución.

jueves, 28 de mayo de 2009

Sensación Aterradora


De repente me asaltó una sensación aterradora. Fue como si hubiera despertado de una pesadilla espantosa. Me sentí como hundido en un vacío de soledad y abandono, como en medio de un mar infinito y sin luz.
Fue una sensación que reubicó lo que acababa de vivir, una toma de conciencia.
Entender de repente lo que estaba ocurriendo y percatarme de su abominable naturaleza.
Finalmente todo se puso en orden: habían pasado no menos de dos horas en las que no tenía conexión con ningún medio y por tanto había permanecido aislado de la actualidad.
Arrojado a mi propia percepción, a mis solitarios pensamientos, sin datos, ni noticias, ni mensajes, ni títulos, ni consejos, ni avisos ni sugerencias de consumo. 
En un ensimismamiento sin reparos, sin ecos, sin otro.
Inmediatamente recuperé la conexión. Fue horrible pero estoy de vuelta. 
Trataré que no vuelva a pasar.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Diálogo

Hola!
Hola!
Me escuchás bien?
Más o menos.
Cómo te fue?
Bien, bien.
Bien?
Si bien.
Pero...
No te oigo.
Te fue bien.
Si. La verdad te oigo muy mal. Vos como andás?
Yo bien, estaba un poco preocupado por saber como te había ido.
Bien, todo bien, gracias.
Sabés que me preocupo por vos.
Te lo agradezco, de veras, pero estoy bien.
Me alegro.
Bueno.
Eh...
Cómo?
No, que me gustaría verte.
(pausa)
Bueno todo bien no te hagás problema. Te mando un beso.
Un beso. Chau.
Chau.
Eh.... te puedo decir algo más.
(pausa)
Si.
Sabés que te amo?
(pausa)
Sí.
(pausa)
Bueno, te mando un beso.
Otro.
Chau.
Chau.

martes, 19 de mayo de 2009

Sobre los que "hacen que piensan"

Trato de evitar hablar de lo que detesto o lo que me molesta, me parece que vale mucho más profundizar en mis propias ideas, en mis preocupaciones, en aquello que me promueve reflexiones e intereses genuinos, productivos. Prestar atención a aquellos que me despiertan interrogantes, que me desacomodan, que me generan intriga, perplejidad o admiración.
Sin embargo hay momentos en los que caigo en la indignación, que mi tolerancia hacia lo que me parece berreta me domina. De varias cosas por el estilo me embolan particularmente los tipos que agarran el micrófono o la lapicera o la compu para producir pseudo brillanteces, aparentes lecturas agudas de la realidad, en las que descubren, supuestamente, como en realidad siguen dominando los mismos de antaño pero aportando ahora una nueva retórica que logra decodificar una realidad que es más o menos la misma de siempre.
Me repugna ese regodearse en su narcisismo intelectual decadente y obsoleto que no sé siquiera si les deja la conciencia tranquila, pues a esta altura sospecho que hay algo más cínico y mediocre atrás ya que esa producción que empalaga con consideraciones a nobles valores, apelando a figuras y actores sin actualidad, les permite seguir siendo los gerentes o los referentes privilegiados de un auditorio que adora escuchar discursos que parezcan sofisticados pero que no avancen en ningun rumbo nuevo. Se los puede encontrar con cierta facilidad, quizás demasiada, preservan cuidadosamente sus espacios, se aseguran sus recursos muchas veces con prácticas de las que no suelen hablar y mucho menos tomar en cuenta a la hora de "reflexionar". Son tan patéticos y corporativos y es tal el grado de ruptura entre su maniobrar cotidiano y su producción discursiva que llego al punto en que me dan asco y me detengo porque encuentro que definitivamente y por más presencia y aceptación que logren en ciertos espacio no vale la pena detenerse ni un minuto en ellos.
Deambulo entre la bronca y la indiferencia. Para qué nombrarlos? Algo tiene que valer la pena de este rapto de intolerancia. Pienso.
Al leer este tipo de escribas que "hacen que piensan" afirmo que lo que me estimula es escuchar lo que no esperaba, leer el pensamiento que me sacude, que me cuestiona, que interroga y socava los cimientos mismos de mis convicciones. Me atrae la lectura sin contemplaciones, sin demagogia intelectual, que no dice lo que se espera que sea dicho. Me atrae el escritor/pensador que no habla para que nos sintamos bien. Esos autores siempre son bienvenidos a mi casa, los otros vayan, sé que se preocuparon bastante por tener quienes les den cobijo.

jueves, 7 de mayo de 2009

Cosas que no puedo evitar y me gustaría:

Adoptar una actitud de tipo que sabe de todo, que está muy instruído.
Hablar de cosas de las que no se puede hablar.
Quedar preso de una ansiedad devoradora que por momentos me nubla el entendimiento.
Vagar espasmódicamente por pensamientos inconexos sin ninguna lógica ni entretenimiento siquiera.
Entrar en espirales de suposiciónes acerca de intenciones de los demás para conmigo que me hunden en infiernos de sospechas y temores.
Sucederme en arrebatos de sanguínea pasión.
Actuar desbocadamente.
Apretar las mandíbulas.
Caer en el insomnio.
Desconfiar de mi.
Sobredimensionar lo que necesito.
Desconocer mis límites.
Funcionar con intermitencias.
No poder aceptarme.
Caer en estados de ira.
Nublarme.
Convencerme innecesariamente de cosas de las que puedo prescindir profundamente.
Empeñarme vanamente.
Sobreactuar.
Pretender.
Escribir este tipo de cosas.

sábado, 25 de abril de 2009

De la Angustia y el duelo.

"No elabora el duelo"
Amar a alguien que, habiendo existido, ya no existe, fisícamente o como ser amado y amante.
No poder dejar de querer.

Una especie de empecinamiento involuntario e inevitable.

Paradoja de los afectos, fantasmagoría de las emociones, límite de la razón.
Desgarro, ruptura, quiebre, pérdida, negación, vacío.
Torrente afectivo subsistiendo sin objeto.
Duelo: tiempo durante el cual uno va aceptando que debe dejar de amar a quien ya no está.
Identidad del dolor.
"Duelar", acción de realizar un duelo. Acción de dejar de querer. Reordenamiento del flujo de los afectos.
Proceso, recuperación, equilibrio, coagulación, aceptación.
Cicatriz, sutura, reparación, cierre, aprendizaje, maduración.

jueves, 23 de abril de 2009

Amor es, 
entre otras cosas, 
un sentimiento de profunda atracción 
que se siente por una persona 
con la que acabás de tener un orgasmo.

jueves, 16 de abril de 2009

De la Angustia recordada.

Como esos dudosos creyentes que recuerdan a su Dios en momentos límites, yo he hablado sobre la angustia en momentos de sufrimiento, de pesar.
Cómo hablar de ella sin estar poseído por su narcótico halo? Cómo involucrarse con sus motivos sin sentir su fría brisa en el alma?
Cómo hablar de la angustia sin estar angustiado?
Una aproximación científica. Ascéptica. 
Tendrá valor? No lo sé, pero lo intento.
Trato de recordar. 
Cuando me angustio suelo llorar con facilidad y los motivos se pueden diversificar. Una película infantil, un videoclip, imágenes callejeras. 
Llorar como una acción de drenaje espiritual. Diluídas en lágrimas, porciones de un dolor sin medida rebalsan. Un goteo minúsculo, un fluir intermitente. 
El dolor convertido en lágrimas que brotan sin freno.
Cuando me angustio tiendo a trasladarme caminando, tiendo a trasladarme en general, pero preferiblemente caminando. Creo que esa predisposición al traslado se aferra a la ilusión de poder dejar atrás el sufrimiento que se ha alojado en uno. Un alejarse ilusorio, desesperado, un querer irse de esa patria de congoja y pena.
El otro día no se donde (el cable y el zapping son una combinación letal para el que quiere recordar con precisión las fuentes de su información) una mujer decía que la angustia promueve los llantos y los viajes. 

domingo, 12 de abril de 2009

Cómo voy a estar solo si tengo esta cantidad de fantasmas a mi alrededor?

martes, 7 de abril de 2009

De la Angustia en la madurez. I.


En esta crónica discontinua de cierto recorrido emocional pienso en como se atraviesa una situación de angustia amorosa a una altura de la vida en la que uno ya es, objetivamente al menos, adulto. 
Se abren interrogantes.
En la madurez uno sufre menos? Me parece que no. Entonces uno sufre mejor? resiste mejor el dolor, el sufrimiento? Puede ser. 
No creo que pueda llegar a sufrir como lo hacía a los 20 años. Reconozco algún tipo de aprendizaje emocional. Quizás en eso consista la madurez.
Sin embargo ni pretendo ni deseo perder la capacidad de sufrir, es más reivindico la vigencia de esos estados acongojados, crepusculares. 
Referencias materiales.
En el  cuerpo uno va perdiendo sensibilidad, por zonas, de a cachos, que el dedo gordo del pie, que en alguna zona de las piernas. 
Quizás eso pase también con la zona de uno donde viven las emociones -localización naif: el corazón-, de a cachos uno va perdiendo sensibilidades. Como un proceso de inmunización. 
Pero la madurez también es un proceso de acumulación, se ganan cosas. 
Perspectiva, por ejemplo. 
Algunos saberes. Capacidades como la de soportar, esperar, aceptar, entender mejor las cosas.
Madurez como un revestimiento, como un enriquecimiento.
Concluyo.
El dolor maduro transita por superficies internas más complejas, se expresa con un lenguaje más elaborado y produce reacciones más precisas. Atrás quedó el tono fogoso, arrebatado, abismal. Ahora están las reclusiones, la contemplación, el monólogo interno, cierto espíritu compasivo. 
En la patria de la angustia los maduros nos ubicamos en zonas más silenciosas y penumbrosas, que las explosiones y turbulencias las disfruten los jóvenes.

lunes, 30 de marzo de 2009

Introspección

Uf! A veces me desconozco. Actúo desprovisto de todo tipo de auto evaluación, perceptiva o deductiva.
Me esfuerzo y me involucro ignorándome. Un ejemplo sería el de querer levantar pesas de 200 kilos. Arremeter sin cálculo ni previsión, en un Yo puedo exagerado, desmedido, pretencioso.
Como llevándome a un proceso de autodeslegitimación.
Cuánto mal les hago a los demás y cuánto mal me hago a mí mismo comportándome así.
Qué sentido tiene embarcarse en empresas que están completamente por fuera de las posibilidades de uno? Es cierto que uno debe encarar sin temer, que la cautela excesiva inmoviliza y coarta, que así no hay dinámica posible, que el riesgo es parte esencial de la vida. Es cierto.
Sin embargo esa realidad indiscutible no implica desconocer los límites, la magnitud de las propias fuerzas, de las propias condiciones. Claro que uno puede ir más allá, pero probablemente no de cualquier manera.
Me cuesta aprender esto, me cuesta conocerme, protegerme y así proteger mejor a los demás.
Tengo que seguir pensando en esto. 

viernes, 20 de marzo de 2009

Amar a alguien es disfrutar verlo dormir

Arrorró hermosa
relaje su cuerpo cansado
descanse esos ojos marinos

Arrorro mi nena
brillante la luna cobija
carita de ángel dormido 

Arrorró mis soles
imagina mi amor a las dos
y al menos les canto en sus sueños


miércoles, 18 de marzo de 2009

Cómo se hace? Cómo es la cosa?
Cuál es el camino correcto? 
Cuál es el límite de lo que uno debe considerar del otro y cuál es el límite dónde empieza solo lo que es de uno?
El diario itinerar por terrenos inciertos, por espacios yermos, llenos de escasez.
Qué frágil y fugaz la dicha, que frecuente, pegajoso el malestar.

Qué desagradable la queja.

Me quedo en el interrogante, en cuestionamientos, inconclusos, incompletos.
Esa viene siendo mi morada desde hace mucho.

sábado, 24 de enero de 2009

Ellos, lo pasado y yo


Lo que voy a decir no tiene el más mínimo rasgo de sarcasmo, quizás se me pueda llegar a notar alguna velada crítica pero sinceramente quiero hacer una mención respetuosa sobre un tipo de conducta que observo en gente que estuvo alguna vez ligada a mí y que sin rencor ni resentimiento alguno quiero señalar principalmente por el hecho de que se trata de un tipo de comportamiento ubicado en, cómo decirlo? en la vereda de enfrente al tipo de conductas que tengoyo.
En líneas generales me refiero a esa absoluta ausencia de valoración que algunos hacen de personas con quienes compartieron momentos intensos del pasado, a ese casi nulo compromiso presente que genera el haber compartido momentos, horas, desvelos, sueños, causas, celebraciones, descontroles, proyectos, desgracias entre otro tipo de emociones y circunstancias. Justamente quiero valorar ese gesto tan ajeno a mí. Tengo la impresión de que en ellos se consolida, o quizás siempre estuvo, una afirmación tipo "a la melancolía ni justicia" o algo así. Se trata de un tipo de principio interno que los lleva hacia adelante casi sin lastre, y eso hoy supone, creo, una indudable cualidad y diría condición imprescindible sino para subsistir seguramente sí para ser "exitoso".
No me molesta en lo más mínimo, es más escribo porque me intriga, me pregunto sino será correcto superar la evocación, la veneración de lo vivido y de aquél con quien ocurrió, al fin y al cabo lo que importa es hoy y lo que viene. La verdad, me cuesta, no puedo dejar de caer en la narración exaltada de sucesos que la memoria privilegia con encanto y rescatar con emoción a esos seres que compartieron conmigo esos momentos, esos que si los encuentro quiero abrazar como para que en el contacto se fusionen las memorias y nos traslademos aunque sea por un instante a aquellas èpocas míticas.
No sé, advierto simplemente que ellos no se comportan como yo, hacen su elección y la respeto, aún más, me pregunto sino debería aprender de ellos a olvidar, a no detenerme en la veneración de otros tiempos y de sus intensas emociones. Reconozco que no puedo hacerlo, siento que perdería una especie de tesoro, al fin y al cabo de buena parte de lo que soy, de lo que mantiene en pie, de lo que constituye mi identidad.
En fin, ustedes, enemigos de los empalagos de la melancolía, tranquilos, si algún día caen en las cuevas del recuerdo y por alguna circusntancia o sustancia deambulan por la memoria sensiblera será con un mínimo esfuerzo que me van a encuntrar para pasar el rato, eso sí antes que nada nos damos un abrazo fraterno.

viernes, 23 de enero de 2009

Excequias del que creí ser


La cosa de la bitácora, esa crónica íntima del recorrido subjetivo.
No está dentro de lo que me interesa aprovechar.
Sin embargo algo de la frecuencia, de teclear y tratar de anudar algunas palabras que expresen me va. Eso es lo que estoy volviendo a hacer.
En última instancia no se trata la mía de una existencia que salga de lo ordinario, que derroche glamour ni excesos de ningún tipo. Algún tiempo sé que se escondía en mi la idea de que era yo un ser con elementos, características excepcionales. Creo que necesitaba creer algo de eso. Hoy tiendo a pensar que esa necesidad ocultaba pobremente una dramática incapacidad de aceptarme, de poderme encontrar, como si alguna vez, en algún momento incial algo se hubiera fracturado en mí y solo se hubiera podido mantener unido a través de la ilusión de considerarme a mi mismo como algo distinguido del resto.
Asisto últimamente a las excequias de buena parte de lo que creí de mí. Se trata de ceremonias austeras, bastante silenciosas y circunspectas. Tienen sus momentos de dolor y algunas lágrimas se dejan caer tras evocaciones melancólicas. Pero en general la despedida de ese que necesitaba creer que era me deja mucho espacio para aprender, ya que soy un tipo común bien puedo predisponerme a mejorar día a día algunas cosas. Por eso la nostalgia no domina este momento, y el encontrar mi dimensión humana, discreta, carnal me produce un desconcierto de arranque doloroso pero finalmente agradable y estimulante.

jueves, 22 de enero de 2009

Hoy

Hoy no soy más que un tránsito, una circulación impredecible.
Hoy no soy ganas fervorosas. Hoy no soy convicciones tajantes.
Hoy soy algo que muta.
Hoy soy repentinamente, de a ratos nada más.
Hoy me recuesto varias veces en un vaho interno, en una conciencia neblinosa, en una pesadez del ánimo.
Hoy va a pasar.
Eso lo sé.