jueves, 21 de febrero de 2013

Otro proyecto


Apunto: la expresión "me cayó la ficha" da cuenta de cierto proceso que ha tenido lugar en referencia a una emoción, a un sentimiento, es distinta a una deducción, a un razonamiento. Alude a algún tipo de sensación que se ha vuelto visible.
Pienso en otro proyecto: investigación exhaustiva sobre la fisiología de las emociones. 
Las ciencias duras, específicamente las neurociencias, establecen una especie de territorialización cerebral que determina las zonas del cerebro que se activan en cada situación. Así, por ejemplo, se sabe que las amígdalas y el hipocampo son los centros en los que principalmente se producen las emociones.
Pienso que mi proyecto no se contrapone con estas investigaciones. Mi objeto de estudio sería no el aparato emocional sino las emociones mismas.
Cómo es la estructura y la dinámica de un sentimiento.
Más específicamente cómo es la vida de un sentimiento. Cuál sería la diferencia entre una emoción y un sentimiento.
Parte del proyecto consistiría en completar un catálogo. Se me ocurren: afecto, cariño, amor, pasión, odio, indiferencia, resentimiento, decepción, entusiasmo, intriga, curiosidad, aversión, rechazo. Cada una de estas tipologías tiene su caracterización específica y probablemente su propia dinámica. Hay más, seguro.
Vertiente "cultural" de investigación, es decir, poder determinar hasta qué punto una emoción está determinada por el contexto. Pienso que la sensación del patriotismo definitivamente no existió hasta que no existieron las naciones y que los síndromes de abstinencia de las redes sociales tampoco antes de que estas existieran.
El principal enigma de toda la investigación: la dinámica del enamoramiento.

viernes, 15 de febrero de 2013

Devoción Bolaño


Terminé de leer Los detectives salvajes. Voy a seguir leyendo otros libros de Bolaño. No pensé que a esta altura de mi vida me iba a bancar encarar libros de más de trescientas páginas. Los detectives... tiene seiscientas, el próximo que encaro, 2666, tiene más de mil.
No se si hay que agregar algo más. Sumergirse en la lectura de una obra literaria de semejante dimensión en esta época multimedial debe tener algún sentido. Insume bastante tiempo.
Leer a Bolaño resultó para mí una de las experiencias, digamos estéticas por llamarla de algún modo, más importantes de los últimos tiempos. Ya sé que no descubro nada, pero esto lo escribo para mí, para darle forma a una sensación muy profunda que tiene que ver con lo que te puede producir el leer en sí mismo, por un lado y que me produjo en particular leer a Bolaño. Cómo podría explicarlo? Hay algo de efecto 3D (puede que la analogía lleve para un lado tecno que nada que ver), como de internarse con una facilidad adictiva en un mundo, en un universo extremadamente ameno y conmovedor.
Ya lo dije, sumergirse. Agarro el libro y sin mediación me fui de este mundo para internarme en el suyo. Sin demoras, naturalmente, sensibilizado casi al instante. No tengo muy claro cuantas veces me pasó esto con un libro.
Estoy en medio de la fascinación y el encanto. Siento la devoción, esa sensación que me producen algunos directores de cine, algunos músicos, es un algo más, digamosló, los querés, se arma un vínculo afectivo. Bolaño entró a ese territorio interno en mi vida. 
Febrero 2013.